Decorando un pequeño departamento en Recoleta
El entorno natural y los pequeños detalles de categoría que incorporó la dueña de casa, suman encanto a la decoración de este departamento.
En un edificio de estilo francés del 1900, en Recoleta, una joven diseñadora gráfica halló la respuesta a muchos anhelos "con voluntad y algunas sesiones de reiki, que ayudaron a atraer el espacio tantas veces soñado".
Bajo las ventanas, con geranios que sobrevuelan etéreas muñecas 'Cirque du Soleil', el sillón (L´Interdit) adquiere aire autóctono con su manta salteña
Es que este departamento en primer piso que da al contrafrente, lejos de vistas a una paredón de cemento cuarteado, lleva a quienes lo visitan a una dimensión de total relajación gracias a su privilegiado pulmón poblado de árboles.
La biblioteca contiene objetos que aportan gracia y estilo: reloj de madera sobre un gancho de hierro, marcos (Tigre), oveja de papel maché
La ausencia de ventanas vecinas permitió ampliar las propias sin quitarle intimidad a nadie. Esta medida potenció lo blanco, luminoso y tranquilo de esta casa, en la que una decoración sencilla y exquisitamente femenina se luce sobre un marco de categoría, con pisos de roble de Eslavonia, techos de tres metros de alto y herrajes de bronce.
FUENTE: BLOGYDECO
En un edificio de estilo francés del 1900, en Recoleta, una joven diseñadora gráfica halló la respuesta a muchos anhelos "con voluntad y algunas sesiones de reiki, que ayudaron a atraer el espacio tantas veces soñado".
Bajo las ventanas, con geranios que sobrevuelan etéreas muñecas 'Cirque du Soleil', el sillón (L´Interdit) adquiere aire autóctono con su manta salteña
Es que este departamento en primer piso que da al contrafrente, lejos de vistas a una paredón de cemento cuarteado, lleva a quienes lo visitan a una dimensión de total relajación gracias a su privilegiado pulmón poblado de árboles.
La biblioteca contiene objetos que aportan gracia y estilo: reloj de madera sobre un gancho de hierro, marcos (Tigre), oveja de papel maché
La ausencia de ventanas vecinas permitió ampliar las propias sin quitarle intimidad a nadie. Esta medida potenció lo blanco, luminoso y tranquilo de esta casa, en la que una decoración sencilla y exquisitamente femenina se luce sobre un marco de categoría, con pisos de roble de Eslavonia, techos de tres metros de alto y herrajes de bronce.
FUENTE: BLOGYDECO
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