Casa CyD - V.Oid + Diacrítica
El proyecto consiste de una casa de campo de 470m² en el Country Club Los Cóndores de Chaclacayo, al norte de Lima. Se ubica en un terreno de aproximadamente 2500m², con una geometría muy irregular y desniveles acentuados, entre ellos, una depresión con cisternas en desuso.
Para reintegrar el área libre del terreno ¬–su mayor capital– ubicamos a la casa contra el extremo más escarpado del mismo, consolidando así el área exterior frente y por debajo de su línea de visión. Valiéndose de una simetría muy marcada, la forma de la casa consiste de dos alas en V que se amoldan al perímetro del terreno, maximizando el área plana de jardín frontal.
El ingreso a la casa se ubica en su extremo izquierdo. Una galería longitudinal semi-techada se extiende sobre todo el frente de la casa, articulando los ambientes sociales de recibo, sala, comedor, cocina y terraza.
En el segundo piso se encuentran los ambientes privados: sobre el ala izquierda, los dormitorios de los hijos; sobre la derecha, una terraza familiar y al centro, sobre el volumen con mayor jerarquía, la suite del dormitorio principal, con una vista privilegiada sobre el valle.
La casa es para un apasionado de la madera y es por eso que se explora su uso y expresión de diferentes maneras. Todos los encajes se diseñaron para no ser vistos generando así un aparente equilibrio de las piezas que descansan unas sobre otras. Las columnas de madera descansan sobre un marco vacío de acero Corten.
Los pisos, columnas y vigas de la terraza se trabajaron con madera Cumaru pero de diferentes calidades, los nudos, vetas y accidentes naturales son parte de la expresión del material. El sol y sombra juega con un degrade de distancias que responden al asoleamiento de la casa.
Las bugambilias de los maseteros del segundo piso crecerán para darle una atmósfera con colores al espacio bajo el sol y sombra principal de la casa. El concreto vaciado en encofrado de madera de veta profunda enmarca el árbol Olivo del ingreso. La piscina cuenta con los muros laterales del mismo tratamiento de concreto y el piso y respaldares se trabajaron como una alfombra de pepelma azul. El segundo piso cuenta con una superficie de piedra pizarra oixdada y todo el perímetro del terreno junto con el muro que delimita el área de la piscina se trabajo con piedra de la zona.
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Arquitecto: Felipe Ferrer (V.Oid) + Alonso Toledo (Diacrítica)
Arquitecto colaborador: Karlos Riojas
Ubicación: Lima, Perú
Arquitecto: Felipe Ferrer, Alonso Toledo
Año: 2012 Área: 450 m2
Fotógrafo: Juan Solano
Para reintegrar el área libre del terreno ¬–su mayor capital– ubicamos a la casa contra el extremo más escarpado del mismo, consolidando así el área exterior frente y por debajo de su línea de visión. Valiéndose de una simetría muy marcada, la forma de la casa consiste de dos alas en V que se amoldan al perímetro del terreno, maximizando el área plana de jardín frontal.
El ingreso a la casa se ubica en su extremo izquierdo. Una galería longitudinal semi-techada se extiende sobre todo el frente de la casa, articulando los ambientes sociales de recibo, sala, comedor, cocina y terraza.
En el segundo piso se encuentran los ambientes privados: sobre el ala izquierda, los dormitorios de los hijos; sobre la derecha, una terraza familiar y al centro, sobre el volumen con mayor jerarquía, la suite del dormitorio principal, con una vista privilegiada sobre el valle.
La casa es para un apasionado de la madera y es por eso que se explora su uso y expresión de diferentes maneras. Todos los encajes se diseñaron para no ser vistos generando así un aparente equilibrio de las piezas que descansan unas sobre otras. Las columnas de madera descansan sobre un marco vacío de acero Corten.
Los pisos, columnas y vigas de la terraza se trabajaron con madera Cumaru pero de diferentes calidades, los nudos, vetas y accidentes naturales son parte de la expresión del material. El sol y sombra juega con un degrade de distancias que responden al asoleamiento de la casa.
Las bugambilias de los maseteros del segundo piso crecerán para darle una atmósfera con colores al espacio bajo el sol y sombra principal de la casa. El concreto vaciado en encofrado de madera de veta profunda enmarca el árbol Olivo del ingreso. La piscina cuenta con los muros laterales del mismo tratamiento de concreto y el piso y respaldares se trabajaron como una alfombra de pepelma azul. El segundo piso cuenta con una superficie de piedra pizarra oixdada y todo el perímetro del terreno junto con el muro que delimita el área de la piscina se trabajo con piedra de la zona.
Arquitecto: Felipe Ferrer (V.Oid) + Alonso Toledo (Diacrítica)
Arquitecto colaborador: Karlos Riojas
Ubicación: Lima, Perú
Arquitecto: Felipe Ferrer, Alonso Toledo
Año: 2012 Área: 450 m2
Fotógrafo: Juan Solano
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